En el día mundial del inquilino, más de 80 nuevas inquilinas e inquilinos del municipio de Getafe presentaban públicamente su unión a más de 300 inquilinos de toda la Comunidad de Madrid que, junto al Sindicato de Inquilinas, se están organizando para no pagar las subidas de su casero: el fondo de inversión Blackstone.
Desde hace más de 6 meses varios bloques de inquilinas de municipios como Alcorcón, Torrejón, Aranjuez, y barrios madrileños como Vallecas y Carabanchel, están organizándose para conseguir sentar a su casero, Blackstone, a negociar unos alquileres sin las subidas abusivas que éste les impone si quieren seguir viviendo en sus casas. El fondo de inversión estadounidense compró todas estas viviendas de protección pública al calor de la crisis de 2008, beneficiado por la nueva regulación de SOCIMIS que se implantó en España. Ahora, cuando se van acabando las protecciones, impone subidas de los alquileres que van desde un 38% a un 70%, como es el caso de estos bloques. Pero, como cuenta María, inquilina de los bloques de Alcorcón “todo este tiempo hemos continuado en nuestras casas, sabiendo que teníamos que movilizarnos y no ceder ante las presiones de la propiedad para abandonar la lucha. Eso es lo que quieren, que nos vayamos de nuestras casas o que nos sintamos tan solas que consigan que firmemos unos nuevos contratos con unas subidas a las que no podemos hacer frente”. Durante este tiempo, estas inquilinas han llevado a cabo diversas acciones de presión sindical, como la realizada en julio en el Hotel Axel de Madrid, propiedad de este mismo fondo. En esta línea, el pasado jueves 29 de septiembre se aprobaba por el pleno del Ayuntamiento de Getafe (con el apoyo de todos los grupos excepto VOX) una moción en apoyo a la lucha que los inquilinos de estos Bloques van a llevar a cabo, además del apoyo directo de la Alcaldesa de esta localidad.
El Sindicato de Inquilinas denuncia la práctica que el fondo buitre Blackstone ha decidido llevar a cabo ante este conflicto, y es que “no solo se niega a sentarse a negociar los contratos de más de 300 inquilinos e inquilinas, sino que ha comenzado a interponer demandas de desahucio a muchas de nuestras compañeras como forma de amenaza y con la pretensión de desincentivar que continúen con la lucha”, comenta Alicia, portavoz del Sindicato de Inquilinas. En este punto, las inquilinas en lucha denuncian la celebración de un Congreso por parte de Blackstone y sus SOCIMIS los días 20 y 21 de octubre en el Teatro Goya de Madrid, sosteniendo que es inadmisible que acudan a esta ciudad a lavar su imagen mientras tiene ya interpuestas varias demandas de desahucio contra sus inquilinas. “No permitiremos que el mismo fondo buitre que amenaza a nuestras compañeras con dejarlas en la calle, pueda venir a nuestra ciudad a pasearse tranquilamente”, sostiene Rosa , inquilina de los bloques en lucha de Vallecas.
Todo esta situación se produce en un contexto de inflación en el que los precios de los bienes básicos para la vida como el gas o la energía no dejan de subir, al igual que los alquileres. Desde el Sindicato de Inquilinas se insta al Gobierno a que tome medidas urgentes también para contener y bajar el precio de los alquileres mientras no se desencalle la Ley de Vivienda en el Congreso. Esta Ley continúa bloqueada por la no aceptación del PSOE a las enmiendas del movimiento de vivienda, las cuales recogen, entre otras, la regulación efectiva de los precios de los alquileres.